Sabemos que ya te hiciste la gran pregunta: ¿Cómo hacer una mudanza y no morir en el intento? Por eso has llegado hasta aquí hoy. En este artículo de Busca tu choza nos hemos propuesto ponértelo fácil dándole respuesta a las preguntas más frecuentes: ¿Cómo hacer más fácil una mudanza? ¿Qué hay que hacer cuando te mudas? ¿Cuánto tiempo se tarda en hacer una mudanza? En general vamos a guiarte a través de todos los puntos importantes sobre cómo hacer una mudanza y no morir en el intento. Te prometemos buenos resultados.
Contents
- Cómo organizar una mudanza: primeros pasos
- 12 consejos para mudanza: los más prácticos y generales
- 1. Planifica, no empaques todo a la vez
- 2. Separa lo frágil de lo fuerte
- 3. Lo que no necesites, véndelo
- 4. Lo que no sirva realmente, recíclalo o tíralo
- 5. Desarma o desmonta los muebles que te permitan hacerlo
- 6. Es importante usar cajas de cartón
- 7. ¿Qué hacer con las macetas y plantas?
- 8. La ropa enrollada ocupa la mitad del espacio
- 9. Da de baja y de alta los servicios de la casa
- 10. Pon aparte el kit de necesidades básicas
- 11. Mejor que no estén los niños y las mascotas
- 12. Dedica el tiempo necesario a la mudanza
- ¿Cuánto tiempo se tarda en hacer una mudanza?
- Qué hacer con lo que no se puede desplazar
- Cómo hacer una mudanza y no morir en el intento: conclusiones
Cómo organizar una mudanza: primeros pasos
En los primeros pasos sobre cómo organizar una mudanza, conviene que antes de poner manos a la obra, pienses un poco sobre los puntos de la siguiente lista. La esencia de esta etapa es planear bien lo que vas a hacer. Estos puntos te ayudarán a saber cómo hacer más fácil una mudanza y a ahorrar mucha energía:
- Cuáles son las cosas más fuertes y resistentes, que pueden servir como base a otras y que no requieren tanta vigilancia.
- Cuáles son las cosas frágiles, para ponerlas juntas, etiquetarlas como “Frágil”, ponerlas siempre arriba (sin nada encima) y mantenerlas con vigilancia especial.
- Cuáles son las habitaciones más importantes, para embalarlas de últimas, porque las usarás hasta el último momento. Suelen ser la cocina y el baño.
- Cuáles son los espacios que puedes embalar primero. Suelen ser los de ocio, como la sala, estudios, cuartos de juego, etc.
12 consejos para mudanza: los más prácticos y generales
Si te has propuesto vender o comprar una casa en Cuba, visita el portal de Busca tu choza para que puedas gestionar la compraventa de manera fácil, rápida y segura. Y aquí tienes además algunos consejos de mudanza, para cuando llegue el momento:
1. Planifica, no empaques todo a la vez
Planifica la mudanza y el embalaje. Ese orden es mejor ponerlo por escrito, como una especie de “guión de mudanza”. Y ten en cuenta que este guión puedes empezar a escribirlo desde semanas antes de mudarte, para que puedas meditarlo bien, rehacerlo, enmendarlo, etc.
A veces puede parecer que es más estimulante o rápido empacar en orden aleatorio, pero en realidad eso es el caos, da la sensación de que son más cosas, y luego no puedes tener el control de dónde viaja cada cosa.
Especialmente si eres de las personas que ante actividades intensas o amplias se bloquean y no saben por dónde empezar, lo mejor es planificar y cumplir con ese orden bien previsto, para que todo ocurra sin estrés.
2. Separa lo frágil de lo fuerte
Los adornos delicados, las vajillas, los retratos, equipos sensibles y otros elementos frágiles, empácalos envueltos en papel de burbujas de aire, y a las cajas en que van a viajar ponles una etiqueta de FRÁGIL, y si es necesario, ponles también etiquetas de ESTE LADO HACIA ARRIBA. Advierte de esto a quienes participen en la estiba de las cajas y en la mudanza.
Un apartado especial de lo “frágil” son los documentos importantes que toda casa posee: escritos de propiedad y notariales, historiales de facturas, títulos y diplomas, álbumes de fotografías, etc. Todos estos documentos son frágiles, no tanto en sentido de poder romperse sino en sentido de que no deben extraviarse.
A la caja de estos documentos especiales tal vez no debas ponerle una etiqueta que revele lo que hay dentro en una circunstancia medianamente pública como una mudanza. Mejor rotula en ese tipo de caja un código que entiendas, para que la tengas localizada. Y a la hora de hacer la mudanza, quizás alguien responsable pueda llevarla sobre las piernas.
3. Lo que no necesites, véndelo
Si tienes muebles, objetos, equipos, ropas, etc., que no uses o de los que quieras deshacerte, mejor véndelos antes de mudarte. Así habrá menos equipaje que transportar. Actualmente existen aplicaciones para dispositivos móviles y sitios web que ayudan en este tipo de compraventas de segunda mano, y funcionan perfectamente.
Siempre hay personas que van a necesitar lo que tu familia ya no necesita. Por esta misma vía también puedes adquirir cosas que vayas a necesitar en la nueva casa y que aún no tengas.
4. Lo que no sirva realmente, recíclalo o tíralo
Antes de hacer la mudanza, conviene deshacerte de trastos que en realidad no necesites y que no puedas vender. Es el momento ideal para reducir el mobiliario hogareño y tener menos que mudar.
Ten muy en cuenta no botar cosas que contaminen el medio ambiente, tales como latas con sustancias tóxicas o inflamables, componentes digitales contaminantes, acumuladores de auto, objetos que tardan demasiado en biodegradarse, etc.
Siempre puedes contactar con organizaciones o empresas que se dediquen al reciclado o las refacciones, y así no sólo estarás cuidando el medio ambiente sino que además ganarás algo de dinero, que no viene nada mal.
5. Desarma o desmonta los muebles que te permitan hacerlo
Por ejemplo, desarma ciertas mesas, multimuebles, implementos de ordenadores… Los tornillos o accesorios de cada mueble inclúyelos en el mueble mismo, o en todo caso colócales una etiqueta que aclare a que mueble pertenecen.
6. Es importante usar cajas de cartón
Las típicas cajas de cartón para embalar resultan muy útiles. Puedes comprarlas en kits o pedirlas regaladas en establecimientos que las utilicen. No pesan por sí mismas, no contaminan, se pueden estibar de forma muy pareja y equilibrada, protegen el contenido durante la travesía, y se pueden reciclar, compostar o revender cuando acabes de usarlas.
Que las cosas queden bien empacadas y estibadas, probablemente ayude a ahorrar espacio y dinero durante la mudanza. No obstante, algo conveniente es no llenar en exceso las cajas. Si no caes en la tentación de llenarlas excesivamente, no pesarán demasiado durante la mudanza y evitarás el riesgo de que se rompan.
7. ¿Qué hacer con las macetas y plantas?
Tal vez seas amante de las plantas y te duela dejarlas atrás. Las macetas y tiestos con tierra se cuentan entre los objetos más difíciles de transportar durante una mudanza, porque pueden voltearse y derramarse, romperse, pesar demasiado, etc.
Una buena solución para no tener que dejar atrás tus plantas, es sacar las plantas de las macetas (puedes transportarlas vacías, regalarlas o venderlas), poner la tierra en bolsas y en ellas sembrar momentáneamente las plantas para transportarlas. Sufrirán un poco de estrés durante todo ese proceso, pero no menos que el que necesariamente vivirá la familia.
8. La ropa enrollada ocupa la mitad del espacio
Especialmente si hay que mudar mucha ropa, de repente descubres que ocupa más espacio del que se espera. Siempre puedes buscar cajas especiales para transportar ropas, que incluyen porta perchas.
Pero un consejo: cuando vayas a embalar la ropa, si, en vez de doblarla, enrollas cada pieza sobre sí misma, descubrirás que de este modo ocupa mucho menos espacio. Es difícil de creer hasta que lo compruebas en la práctica.
Ten en cuenta también que si hay ropa que no usas, puedes regalarla, venderla o donarla. Hay iglesias, instituciones y ONG que se dedican a estas cosas, y la ropa que no uses puede ser útil para otras personas.
9. Da de baja y de alta los servicios de la casa
Lo mejor es, antes de llegar al nuevo domicilio, tener de alta los servicios de electricidad, suministros, combustibles, conectividad, etc. O al menos tener la mayoría. Para mayor comodidad, tampoco dejes para el final dar de baja los servicios anteriores si es necesario.
10. Pon aparte el kit de necesidades básicas
Obviamente hay cosas que vas a necesitar apenas llegues a la casa nueva, y más vale que esas cosas estén empacadas juntas y localizables, sin necesidad de desempacarlo todo para ir hallándolo poco a poco.
Para que este punto fluya bien, lo mejor es preparar un kit que cubra las necesidades básicas. Pueden ser útiles de cocina, alimentos, ropa de cama o elementos de baño… Lo específico de esto depende de cada familia. No es mala idea que este kit lo lleves en el coche de la familia hasta el nuevo hogar antes de la mudanza, para que ya esté listo y localizable cuando lleguen.
11. Mejor que no estén los niños y las mascotas
Los niños y las mascotas reciben también estrés durante procesos de mudanza, y lo expresan a través de hiperactividad, rabietas, ruidos, etc. Esto no hace más que aumentar el estrés de quienes están realizando la mudanza.
Por eso conviene que los niños y las mascotas no estén presentes durante la mudanza. Se puede pedir a familiares o amigos de confianza que los cuiden mientras. No obstante, si no se cuenta con el apoyo de familiares y amigos en esta circunstancia, se puede planificar actividades para que los niños se mantengan ocupados y distraídos.
Para el caso de los animales, en las tiendas de mascotas se venden productos (muchos de ellos naturales) para evitar o aliviar el estrés de las mascotas durante procesos como mudanzas, cambios de espacio, situaciones nuevas, ruidos ambientales y ajetreo, pérdidas de territorio, etc.
12. Dedica el tiempo necesario a la mudanza
No hagas la mudanza con demasiadas prisas, ya que siempre puede haber contratiempos, y es mejor que haya un margen de tiempo para ir a ritmo normal. El exceso de prisas puede traer mal embalaje, roturas, detalles pasados por alto, imprevistos, etc. Incluso, si es posible, te convendrá ir haciendo adelantos de limpieza y recogida desde tiempo antes de mudarte.
¿Cuánto tiempo se tarda en hacer una mudanza?
Si te has preguntado cuánto tiempo se tarda en hacer una mudanza, la respuesta es, por supuesto, que eso depende:
- Depende del tamaño de tu casa.
- Del mobiliario que tengas.
- De la cantidad de decoración.
- De si hay objetos grandes o pesados.
- De la fragilidad de las cosas que vayas a transportar.
- De la cantidad de personas que van a realizar el proceso de mudanza.
- De si son especialistas o es la propia familia.
- De si hay armonía y trabajo en equipo.
- De si planificaste o no la mudanza.
- De si la casa suele estar organizada o no…
No obstante, hablando en términos generales, digamos una respuesta aproximada. Para una casa “normal” de entre 65 y 80 m2, con mobiliario y decoración normal en cantidad y nivel de fragilidad, y realizando la mudanza la propia familia o una pareja; entonces la respuesta es que realizar la mudanza tardará un par de días, digamos, todo un fin de semana.
Qué hacer con lo que no se puede desplazar
Tal vez tengas objetos o implementos que no se puedan mudar a la casa nueva, ya sea porque son demasiado voluminosos o pesados, o porque realmente no caben en la nueva casa, o porque son peligrosos, tóxicos o inflamables. Puedes preguntarle al equipo de mudanzas si definitivamente estas cosas no se pueden transportar o si tienen costo extra.
En caso de que no puedan transportarse, siempre puedes reciclar objetos o componentes, venderlos como chatarra o como refacciones, desecharlos contratando servicios de empresas que se dediquen a ello, etc.
Cómo hacer una mudanza y no morir en el intento: conclusiones
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Y para cuando llegue el momento de la mudanza es que hemos escrito todos estos consejos. Hacer una mudanza no es fácil, de acuerdo. Pero siguiendo todos los consejos que hemos dado en este artículo, lo lograrás con éxito:
- Si meditas un poco antes de entrar en acción.
- Si organizas y catalogas bien todo.
- Si te deshaces de lo que no necesitas (ya sea vendiéndolo, reciclándolo o tirándolo).
- Si agrupas lo frágil con lo frágil y no le pones nada encima.
- Si agrupas lo fuerte y lo resistente y eso lo usas como base si es necesario.
- Si embalas todo en orden, pensando en el orden inverso a la hora de desmontar y desembalar…
Si haces todo esto así, entonces comprobarás, que hacer una mudanza no es fácil, pero tampoco es tan difícil. Y si a todo esto le sumas el placer de instalarse en un nuevo espacio, con todos los beneficios que buscabas, entonces puede que hacer la mudanza hasta se convierta en un placer para ti y para los tuyos.
Como conclusión de este artículo y del proceso de mudanza, ten en cuenta que puedes festejar el fin de la mudanza, sea en la misma casa o durante un paseo de descubrimiento de la nueva ciudad o barrio. Esperamos haber puesto un grano de arena en esa felicidad.