Saber cómo aislar un techo del calor es actualmente un conocimiento importante. Los efectos del exceso de sol se están haciendo sentir en cualquier latitud del planeta. En términos domésticos, esto significa que durante el día el sol se mantiene pegando fuerte en el techo de la casa, de modo que las personas en el interior sufren el exceso térmico.
Si el techo no cuenta con un buen método de aislamiento térmico, el calor del techo puede sentirse incluso en la noche, luego de todo un día de acumulación (especialmente si se trata de un techo de chapa o de uralita). Para evitar el exceso térmico en el interior de la casa, aprende en este articulo cómo aislar un techo del calor (y también del frio) mediante varios métodos y trucos efectivos.
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Cómo aislar un techo del frío y del calor
Dos preguntas frecuentes son: ¿Qué material es bueno para aislar el calor?, y: ¿Qué poner en el techo para que no pase el calor? Hay que decir que existen pinturas que aportan aislamiento térmico al techo, lo mismo que para las paredes. Sin embargo, los métodos realmente óptimos para que el calor y el frío no atraviesen el techo, son los que se basan en láminas, capas o paneles de diversos tipos de materiales que se venden en rollos y se fijan al techo, tales como polietileno, aluminio, poliestireno expandido, lana vidrio o lana roca.
Colocarle algún tipo de aislante térmico al techo no sólo protegerá a la casa y a las personas contra el calor, el frío y la humedad. El aislante térmico tiene además otras ventajas, tales como el aislamiento también acústico con respecto al exterior, la protección del techo mismo contra la intemperie (lo cual alarga su vida útil), y el ahorro energético, ya que no habrá que ventilar tanto durante el calor ni que calefaccionar tanto durante el invierno.
Si nos preguntan realmente cuál es el mejor aislante para el techo, responderemos que es difícil decidir a priori cuál de estos materiales es mejor para una casa, porque en verdad eso depende del material del techo y de cuánto ascienda o descienda la temperatura en la región. En dependencia de cuánto frío o calor haga, es que se puede definir cuál de estos materiales usar para el aislamiento térmico del techo. Veamos esto con más detalle.
(Hablando de materiales de techo: Si necesitas saber cómo aislar del calor un techo de chapa, o cómo aislar del calor un techo de uralita, cualquiera de los siguientes métodos te va a ser útil.)
Láminas de aluminio reflexivo de doble capa
El aluminio reflexivo de doble capa puede ser una buena respuesta si te has preguntado cómo aislar un techo del calor de los rayos del sol intenso. Este método de aislamiento, como su nombre indica, funciona mediante reflexión. La cualidad metálica del aluminio hace que los rayos de sol se reflejen en vez de atravesar el techo.
El aluminio reflexivo puede ser de doble capa o de varias capas, y suele incluir un sellado térmico con burbujas de polietileno, que funciona de forma parecida a las esferas cerámicas que contienen las pinturas térmicas.
Colocar capas de polietileno en el techo
Otro buen método para aislar el techo tanto del calor como del frío, es colocarle capas de polietileno. Se venden en rollo, y tienen un grosor de varios milímetros. Estas capas hay que sujetarlas de algún modo al techo, por ejemplo usando grapas, tornillos, etc.
Y como acabado conviene poner cartón yeso sobre las capas de polietileno. Si tu región no es demasiado fría, con esto bastará para protegerla. Pero si es zona de mucho frío, lo mejor es hacer lo que diremos a continuación.
Colocar capas o paneles más gruesos de otros materiales
Para zonas más frías, existen como mínimo 3 opciones:
- Capas de poliestireno expandido
- Capas de lana vidrio
- Capas de lana roca o lana mineral
Estos materiales también se venden en presentación de rollo, o en formato de paneles, pero su grosor es mucho mayor que el del polietileno (está en el orden de los centímetros de espesor). Te recomendamos que en zonas muy frías coloques paneles de no menos de 10 cm de espesor.
Las capas de poliestireno expandido, lana vidrio y lana roca, se colocan de la misma manera que las de polietileno: se sujetan al techo con grapas y se cubren con cartón yeso. En cambio los paneles deben sujetarse con otros aditamentos; por ejemplo, entre tablas de madera.
Aplicar pintura de caucho al techo
La pintura de caucho para techos tiene sobre todo propósitos impermeabilizantes, pero es también un estupendo aislante térmico. Por lo que al aplicarla, estarás logrando el doble propósito de impedir que pasen el agua y la temperatura, sea calor o frío.
Si tu techo no es de mampostería sino de otro material, y te has preguntado, por ejemplo: ¿Cómo aislar un techo de chapa del calor?, a lo mejor tu solución es aplicarle pintura de caucho. Si no se trata de una región demasiado fría, tal vez este método te resulte más fácil de aplicar que los que hemos visto hasta ahora, además de que probablemente te salga más económico.
Aplicar pintura anticondensación al techo
Su nombre de “pintura anticondensación” se debe a que evita el fenómeno de que, en temporada de frío, el vapor de agua se condense y se adhiera a las paredes, lo que generaría moho y hongos. Esta pintura normalmente se aplica directo en las paredes interiores de la casa, y aísla muy bien y evita que las gotas de agua se adhieran.
No obstante, la pintura anticondensación posee potentes propiedades de aislamiento térmico: evita que hasta el 80 % del calor que recibe atraviese el techo y pase a la casa. Esto determina que se pueda aplicar perfectamente en el techo y genere aislamiento térmico tanto del frío como del calor.
Este método (tal como los otros basados en pinturas) se caracteriza por la gran facilidad de aplicación que tiene. Se aplica igual que cualquier otra pintura, y se encuentra en el mercado en diversos colores, incluso en presentación transparente tipo esmalte.
Finalmente: como aislar un techo del calor de forma sencilla y ecológica
Seguramente has oído hablar o has visto algunas ciudades actuales que tienen las calles de asfalto blanco, a diferencia de las típicas calles negras. Esto se debe a que el color blanco absorbe mucho menos el calor del sol que el negro, por lo que mantiene la calle fresca, y por consiguiente se evita el exceso térmico en la ciudad. Es el mismo principio por el cual tantas casas de pueblos tradicionales se pintan de blanco con cal.
Por ejemplo, en el sur de España, donde la presencia árabe fue más fuerte, se adoptó la tradición de las ciudades árabes de proteger las casas del sol del desierto usando el sencillo recurso de pintarlas de banco. Son los llamados “pueblos blancos”. Ahora aplica este mismo principio a tu techo: píntalo con alguna pintura blanca (no necesariamente tiene que ser pintura especial para techos), y comprobarás los resultados.
La casa se mantendrá fresca gracias a que el techo, durante el día, absorberá menos el calor solar. Este es un aislamiento que sólo se aplica al calor. Para el frío no funciona, ni para la humedad o la filtración de agua. Su gran ventaja es que es la mar de sencillo, económico y fácil de aplicar.